Mostrando entradas con la etiqueta trabajo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta trabajo. Mostrar todas las entradas

Trabajo para sobrevivir o para ser feliz

En el   IV Congreso de Consultoría celebrado por la Asociación de Empresas de Consultoría de Terciario Avanzado de la Comunitat Valenciana (Aecta). La  profesora, Elsa Punset, hija del divulgador científico, Eduardo Punset, cita algunas cosas muy interesantes a tener en cuenta para que nuestro trabajo deje de ser aburrido y nos proporcione algo de felicidad. Entre otras cosas dice que “La felicidad ayuda mucho a la innovación, por eso es necesario   de que el jefe sepa motivar a sus subordinados y hacerles sentir parte de la empresa, que estén orgullosos de trabajar en ella.”
Para que un empleado se sienta orgulloso,  esté a gusto en su empresa y sea feliz, además de un entorno favorable como lo son Google, Redbull o Pixar, que de paso cave felicitar a dichas empresas por crear ese ambiente de trabajo. También es muy indispensable que se repartan los beneficios económicos con los empleados de las empresas. El mal reparto de la riqueza en el mundo comienza por las empresas que no son capaces de repartir las ganancias de manera equitativa con sus propios empleados y cuando viene una época de menos ingresos los primeros en sufrir recortes son los que más trabajan.
Los bonos que se llevan los directivos son una aberración de vergüenza comparados con los miserables sueldos que perciben los que pasan 8 y 10 horas en su trabajo, haciendo las tareas que los señoritos no quieren hacer. Según el periódico El Mundo 66.900.000€ se repartieron entre 22 directivos del Banco Santander, en forma de bonos, esto es aparte del sueldo fijo que de por sí ya es alto. Haciendo la división da una friolera media de 3.040.910€ por cada uno, mientras que muchísimos cajeros o cajeras no llegan a 1.000€ mensuales o sea ni 12.000€ y eso que hablamos de una empresa del sector financiero que supuestamente está en crisis. Desde luego que el jefe no puede ganar lo mismo que un empleado, pero la diferencia es exorbitante. Más alarma social ha suscitado el dinero que se llevan los directivos de empresas en Estados Unidos, directivos que no tienen compasión por su empresa que está en problemas, como algunos de abajo que a lo mejor aman más a su empresa que estos jefecillos que tratan por todos los medios de incentivar a la gente para obtener más producción.
Mientras no seamos capaces de corregir la avaricia de algunos maniáticos dados a amontonar y amontonar dinero y posesiones con la complicidad de los gobiernos de turno, porque supuestamente los gobiernos están para regular esos desmanes, no podremos salir del desequilibrio social a que nos han llevado estos últimos años.
Al nuevo gobierno español necesitamos hacerle llegar la idea de que haya una obligación por ley, que los beneficios de las empresas se repartan de forma más eficiente y justa, poniendo un límite a los sueldos altos y especialmente a los bonos de los directivos, y corrigiendo el poco dinero que reciben los trabajadores de abajo, los cuales son generalmente aquellos que no tienen enchufe. Si el nuevo gobierno hace esta reforma que es estructural, seguro que tendrá el apoyo y el cariño del pueblo, porque será más feliz. Y si lograse traer el dinero, que los que sabemos, lo tienen en paraísos fiscales no necesitamos muchos años para salir de la crisis ni seguir aumentando la deuda del país hasta el punto de no poderla pagar.
Pero si seguimos en el mismo modelo económico, del despilfarro burocrático y  de ayudar al poderoso cuando está débil y cerrar los ojos a su explotación, ignorando la miseria de sus trabajadores que hacen milagros para llegar a fin de mes. La diferencia entre el rico y el pobre seguirá aumentando como hasta ahora.
He aquí unos versículos de la palabra de Dios que deberíamos recordar.

¡Ay de ustedes,  que compran casas y más casas,  que consiguen campos y más campos,  hasta no dejar lugar a nadie más,  y se instalan como si fueran  los únicos en el país!
El Señor todopoderoso  ha jurado:
 "Muchas casas serán destruidas;  y por grandes y hermosas que sean,  nadie las habitará” Isaías 5:8

Oigan esto, ustedes que oprimen a los humildes y arruinan a los pobres del país; ustedes que dicen: "¿Cuándo pasará la fiesta de la luna nueva, para que podamos vender el trigo? ¿Cuándo pasará el sábado, para que vendamos el grano a precios altos y usando medidas con trampa y pesas falsas?
¡Arruinaremos a los pobres hasta que ellos mismos se nos vendan como esclavos para pagar sus deudas, aunque solo deban un par de sandalias! ¡Venderemos hasta el desecho del trigo!"
El Señor ha jurado por la gloria de Jacob: "Nunca olvidaré lo que han hecho."
¿Y no habrá de temblar la tierra  por todo esto?
 ¿No habrán de llorar todos sus habitantes?
 ¡La tierra subirá y bajará, como suben y bajan las aguas del Nilo!
"Ese día, afirma el Señor,  haré que se oculte el sol al mediodía,  y en pleno día cubriré de oscuridad  la tierra. Cambiaré las fiestas en llanto  por los muertos, y los cantos en lamentos fúnebres;  haré que ustedes se vistan de luto,  y que se rapen la cabeza en señal de dolor.
 Llorarán como el que ha perdido  a su único hijo, y todo acabará en amargura.
 Amós 8:4-10
¿Te ha gustado este artículo? Compártelo con tus amigos. Puedes enviar este enlace por correo electrónico o dar  en los botones de abajo Facebook , tweeter,  Google +

El propósito de nuestra vida, ser feliz

Consejos para ser feliz
Leyendo algunas entrevistas, se puede decir que llama la atención las respuestas de personajes famosos como la de Andrés  Iniesta, cuando le preguntan:
¿Qué opina de las broncas que recibe Cristiano Ronaldo  lejos del Bernabéu? A diferencia de él, a usted lo aclaman en casi todos los estadios.
Su respuesta es  realmente es cautivadora:
“Lo que piense u opine la gente no tengo nada que decir. Para mí Cristiano es un gran jugador, uno de los mejores del mundo. No juego para ser el número uno. No juego para demostrar nada. Juego para otra cosa, para ser feliz yo mismo.”
Quisiera recalcar las palabras “para ser feliz yo mismo” Esta frase debería calar hondo en los que tenemos el privilegio de leer esta respuesta de un profesional. No hay duda que este señor ha encontrado su vocación, ha encontrado el  propósito de su existencia en este mundo, él nació para eso, para ser feliz con su trabajo y hacer feliz a la gente que disfruta de su juego.
Todos te
nemos un propósito en la vida, nosotros no estamos por casualidad en este mundo.
Cuando una persona encuentra el propósito en su vida, o sea, descubre para que ha nacido. Levanta pasiones con su actividad, es admirado por tantos seguidores, es feliz haciendo lo que hace y el éxito lo tiene seguro.
Todos deberíamos enfocarnos en descubrir el propósito por el cual estamos aquí y cuando lo tengamos claro seguir ese camino que nos dicta el corazón.
La depresión, la angustia, la inconformidad con la vida y todo el estrés de la sociedad moderna se debe justamente a que no ha encontrado la razón de su existencia. Mucha de la culpa la tiene la pobre educación que recibimos en los centros de enseñanza, donde nos enseñan que no somos más que un grupo de átomos que se unieron por casualidad, producto de una explosión de la materia, dejando de lado a Dios y a sus enseñanzas.

¿Has descubierto cuál es la razón de tu vida, o tu vida no tiene razón?
Tú tienes un propósito en la vida, tú naciste para algo, ese algo, está escrito en tus genes, tus genes son el libro de Dios por eso dice David en el salmo 139:
"Tú fuiste quien formó todo mi cuerpo;  tú me formaste en el vientre de mi madre. Te alabo porque estoy maravillado,  porque es maravilloso  lo que has hecho.
 ¡De ello estoy bien convencido!
No te fue oculto el desarrollo de mi cuerpo  mientras yo era formado en lo secreto, mientras era formado  en lo más profundo de la tierra.
Tus ojos vieron mi cuerpo  en formación;  todo eso estaba escrito en tu libro.
 Habías señalado los días de mi vida  cuando aún no existía ninguno de ellos."
Para descubrir el motivo de tu existencia seguramente tienes que preguntarte: ¿Qué me apasiona y me hace feliz? Pero esta pregunta tiene que estar relacionada con el servicio a los demás, es decir la pregunta correcta  sería. ¿Haciendo qué cosa que ayude a los demás siento mucha pasión?
Pregúntate, y toma un tiempo razonable para responder. Seguro encontrarás el motivo de tu existencia en la Tierra. Y vas a poder trabajar para eso, para ser feliz tú mismo.

¿Te ha gustado este artículo? Compártelo con tus amigos. Puedes enviar este enlace por correo electrónico o dar  en los botones de abajo Facebook , tweeter,  Google +

¿Te hace feliz tu trabajo?


Muchos que  quieren vender algo, especialmente un negocio por Internet, intentan convencernos de no somos felices en nuestro trabajo y que necesitamos comprar la información que ellos nos venden para alcanzar la felicidad y nuestra realización personal.
Esto lo dicen porque en verdad, nuestro trabajo es muchas veces aburrido, ganamos poco dinero, nos trata mal el jefe, nuestros compañeros son insoportables con sus “bromas”, y los comerciantes aprovechan esta situación para meternos en la cabeza de que si nos montamos un “negocio” por nuestra cuenta seremos felices, daremos una patada a nuestro jefe y comenzaremos a ganar mucho dinero. En la gran mayoría de los caso esto no es así, muchos han comprado los cursos pero no han podido vender absolutamente nada y terminan más infelices que antes y con la sensación de haber sido engañados.
¿Depende nuestra felicidad de nuestro trabajo? Diría que sí, y en gran manera. Pero es solamente una de las demás áreas. Si en un trabajo no nos sentimos realizados y no nos pagan lo suficiente pocas posibilidades tenemos de estar a gusto y decir que somos felices por más que queramos.
Algunos empresarios se han dado cuenta de esto y  un ejemplo cercano es el señor Diego Kirschenbaum que dice: “Trabajaba en una compañía reconocida, con una buena posición y tenía un salario acorde a mis funciones, pero no me sentía realizado, había algo que me faltaba. Y por eso decidí abrirme y armar mi propia consultora".
Kirschenbaum es un happyshifter, una nueva generación  de profesionales para los que la autorrealización, el buen ambiente en la oficina, el compañerismo la liberalidad y  comodidad importan mucho, pero mucho más que un salario abultado. Esta es una nueva tendencia de los nuevos profesionales, y lo que han descubierto es completamente cierto, pero que ya existía desde mucho antes.
El trabajo en los tiempos antiguos o primitivos era una realización personal, era un hobby más que una carga. Los grandes inventores, los grandes desarrolladores de sistemas, no eran ni son asalariados ni explotados.  No estaban ni están asinados en un enorme grupo de personas donde les controlan hasta si van al cuarto de baño durante su jornada. No existía la explotación inmisericorde que existe hoy en algunos trabajos, ni la rigidez de los horarios. De hecho cuando uno tiene un trabajo que le gusta, y donde tiene libertad de acción, seguro que trabaja con más alegría y el salario si no consiste en una limosna, el trabajador se sentirá menos infeliz.
Según un artículo del diario Expansión, "las ocupaciones que producen más satisfacción son las que implican un mayor grado de realización personal, y se basan, por tanto, en las actividades que aportan un alto valor. Aquí el dinero no tiene mucho que ver con la satisfacción en el trabajo".
Está claro que en el trabajo también podemos encontrar satisfacción y por tanto más felicidad. Si nuestro  trabajo nos aporta más amarguras que satisfacciones, por todos los medios deberíamos dejarlo por otro que nos aporte mejores condiciones. No importa que no sea inmediatamente ya que la situación que estamos viviendo no está para escoger, pero por lo menos necesitamos estar atentos para hacer un cambio.

Trabajo vocación y felicidad

Muchas veces se ha dicho que la actitud apropiada es la que nos trae la felicidad,  y no las condiciones externas, también se dice que ni siquiera la abundancia material trae la felicidad. Podríamos seguir  insistiendo más y más sobre esta idea, porque la podemos comprobar en nuestra propia  vida y a través de  la experiencia de mis miles de estudiantes y miles de investigadores que quieren una vida mejor. Dice un profesor  de psicología en la Universidad de Brasil.

Se cuentan por cientos o quizá por millones quienes hacen un  trabajo que no les realiza, un trabajo con el cual están agobiados y descontentos.  A muchas de estas personas sus padres les  impulsaron a tomar la decisión de seguir una  carrera que no les gusta o que por razones económicas pensaron que era la mejor. Seguramente evaluaron los pros y los contras, y pesó mucho en la decisión las mejores posibilidades de ganar más dinero. 
Casi siempre que converso con alguien, me cuentan que a ellos les gustaría otra profesión u oficio pero que con ello no se ganaría la vida y por eso tienen que pagar un precio muy alto por un salario bien remunerado.
Cuando en  la toma de decisiones para nuestro trabajo priman más unos intereses que no nos satisfacen, creyendo que con el dinero que ganemos acalleremos nuestra vocación, seguro que la decisión que tomemos estará equivocada y no seremos felices en nuestra labor porque si algo que no nos gusta lo tenemos que hacer por dinero.Esto será una carga muy pesada en nuestra espalda, y nos atará para desarrollar nuestra felicidad. 
cuando algo nos agrada lo hacemos con gran alegría y dedicación, además nos haremos expertos en nuestra labor y esto conducirá a que ganemos más dinero. por tanto siempre debemos intentar hacer primero lo que nos gusta y lo que es nuestra vocación nata. el dinero acabará llegando.